Entre tanta palabra hipócrita, tanta frase edulcorada, tanto párrafo en piloto automático, tanta nota calcada, solo un dibujo pudo recordar con justicia al Alfonsín que vivimos.
El blog de Diego Rottman
Entre tanta palabra hipócrita, tanta frase edulcorada, tanto párrafo en piloto automático, tanta nota calcada, solo un dibujo pudo recordar con justicia al Alfonsín que vivimos.