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Lo que aprendí: Christopher Crommett

La segunda entrevista de esta serie se la hice a Chris Crommett, vicepresidente principal de CNN en Español para el Boletín 50, de abril de 2002. Hay un par de referencias al 11-S y a la primera (y controvertida) elección de George W. Bush.

La persona que aspira a ser periodista debe nacer con tres «ces»: curiosidad, creatividad y compasión. Sin curiosidad, no sabrá indagar, cuestionar, retar. Sin creatividad, no podrá comunicar con efectividad y originalidad. Sin compasión, perderá de vista el aspecto humano de las noticias y los intereses vitales de sus lectores, televidentes o radioescuchas.

La gran mayoría de las personas está dispuesta a darle a uno información si uno procede de buena fe.

El 11 de setiembre de 2001 aprendí que lo inimaginable puede ocurrir, y que debemos tratar de estar preparados profesional y psicológicamente para cubrirlo. Tambien aprendí que mientras más difícil el reto, mejor responde nuestro personal.

En sitios donde no se ve o conoce a CNN en Español, a veces nos topamos con limitaciones en cuanto al acceso a la información, a los protagonistas de la noticia, al lugar de los hechos, aunque el ser parte de CNN tiende a abrirnos muchísimas puertas.

Cuando me tomo vacaciones trato de «desenchufarme» porque lo considero saludable; le recomiendo lo mismo a todo el que trabaja conmigo. Sin embargo, no resisto la tentación de agarrar unos minutos de algún noticiero de radio o televisión con el cual me cruzo en el camino. Además, cuando viajo, tengo la costumbre de comprar el periódico local o nacional de cada sitio que visito.

Para CNN la mayor enseñanza de haber adelantado erróneamente el resultado de las últimas elecciones presidenciales de los Estados Unidos es que las proyecciones electorales, especialmente en una contienda extraordinariamente cerrada, no son 100% confiables. Esto pese a que por décadas dichas proyecciones habían arrojado información que en general terminó siendo precisa y correcta. Con las nuevas normas y los nuevos filtros que hemos establecido, no creo que se repita ese fenómeno lamentable.

Lo fundamental que desea saber una persona que sintoniza un noticiero o accede a un sitio informativo en Internet es si el mundo es seguro para él o ella, y su familia. Por eso las guerras, los desastres naturales, los crímenes a gran escala son de un interés visceral. La segunda preocupación básica es el bienestar propio y familiar. Allí entra en juego la información que pueda ayudar a la persona a participar más efectivamente en el proceso político, a lograr mayor progreso económico y social, a ser más efectivo profesional y personalmente. Por eso hablamos en nuestros avisos promocionales de la información que usted «necesita saber». Luego hay información que responde a la curiosidad innata de las personas por aprender y saber más sobre temas, personalidades y lugares interesantes.

El consumidor de noticias bien informado usa un amplio menú de medios. No nos consideramos un medio que compite sino que se complementa con los medios con enfoque nacional o local. Vamos a cubrir las noticias con una perspectiva distinta y esperamos ofrecer un «valor agregado» para nuestra audiencia.

Siempre queremos ser los primeros, pero de nada vale si nos equivocamos; es más importante ser los primeros en dar la noticia correctamente.

A veces la línea entre informar responsablemente y ser manipulado es muy fina. Tratamos por todos los medios de no cruzarla. Reconocemos que la proyectada cobertura noticiosa es un factor en la fatídica ecuación que usan los grupos que cometen actos terroristas, pero no por ello debemos dejar de informar un hecho importante. Creo que con el manejo cuidadoso y concienzudo de los videos de Bin Laden, luego de los atentados del 11 de septiembre, las cadenas de CNN dieron un buen ejemplo de como no dejarse manipular.

El buen periodista es metódico, cuidadoso, pero agresivo cuando tiene que serlo. El buen periodista se autoevalúa constantemente para estar consciente de sus posibles prejuicios o nociones preconcebidas. El buen periodista vive en un estado de alerta sabiendo que, si baja la guardia o se descuida, puede cometer un error que puede tener un impacto nocivo enorme.

Tratamos una noticia policial «local» cuando tiene cierta dimensión para ser considerada de interés regional o internacional, o tiene un componente humano tan neurálgico y universal, que trasciende fronteras y diferencias nacionales.

America Latina estaría progresando mucho más lentamente hacia la democracia si no fuera por el trabajo de periodistas independientes e incisivos que destapan prácticas anti-democráticas, la corrupción y la manipulación por parte de entidades poderosas, sean políticas, sociales o comerciales.

Han habido poquísimos intentos de presionarnos indebidamente. Creo que en general se reconoce que CNN no se deja intimidar ni cede ante presiones externas. Obviamente, muchos sectores buscan informarnos de su punto de vista e influenciar nuestra cobertura. Pero eso forma parte del proceso editorial. Aplicando nuestras normas éticas, sabemos poner esta información y estos acercamientos en su justa perspectiva.

Estoy seguro de que, a la larga, la calidad vale más que el amarillismo, sensacionalismo u oportunismo.

Tendemos a ser menos reflexivos de lo que quisiera; es decir, tendemos a reaccionar a las noticias, cosa que hacemos muy bien y para la cual estamos bien capacitados y equipados tecnológicamente. Pero no hacemos un trabajo lo suficientemente bueno en identificar y anticipar las tendencias que pueden ser clave, antes de que comiencen a surtir efecto.

No tenía muchas expectativas con el periodismo, ya que comencé a trabajar en una emisora de radio casi por casualidad. Cuando era estudiante universitario, estaba buscando un empleo de verano que no fuera como los que había tenido en años anteriores: fregando platos o pisos, limpiando baños, repartiendo muestras de jabón, instalando rótulos en taxis, etc. Un amigo de la familia era el gerente de una estación de radio y me dio mi primer trabajo. Me enamoré de esta profesión y, sin haber planificado realmente mi carrera, he terminado teniendo unas oportunidades absolutamente maravillosas.