En el programa de esta semana de Habitación 414 Jorge Rial reveló que hasta hace cinco o seis años todavía miraba los avisos agrupados del diario, imáginándose en qué pedido laboral podía encajar en caso de fracasar en tv. En su reciente libro «Manual Chiche» (del que ya hablaremos), Chiche Gelblung dice algo parecido. La diferencia es que Rial no se veía en ningún trabajo que no fuera el de periodista, mientras que Gelblung asegura que, gracias a su «cultura enciclopédica», puede convencer a cualquiera de que sirve para cualquier trabajo.
Para alguien que no haya estado nunca del otro lado del mostrador de la tv, estas afirmaciones pueden sonar alocadas. ¿Dos conductores con muy buen sueldo y con programas exitosos preocupados por su futuro laboral? Es que la sombra de Nicolás Repetto amenaza a todos los iluminados con el reflector de la fama.
Después de una nota de tapa a Raúl Becerra, Adolfo Castelo, Raúl Portal y Virginia Hanglin para la revista «Salimos», Repetto fue tentado por los entrevistados para hacer notas en «Semanario Insólito», el programa que conducían y producían.
Este joven promisorio continuó escalando posiciones, primero en «La Noticia Rebelde» y después en su renovador programa solista, «Fax». Los premios terminaron de consagrarlo.
Desde entonces fue alternando éxitos con fracasos, lo que no le impidió acumular mucho dinero (igual que Rial y Gelblung) y darse el lujo de tomarse sus «años sabáticos».
Pero hace tiempo que dice que la prensa no lo quiere (Rial y Gelblung también dicen que la prensa no los quiere) y su gran activo, el rating que había logrado en programas como «Nico» o «Sábado Bus», desapareció desde su regreso con «Domínico». Ni éste programa en sus dos intentos y sus infinitas reformulaciones, ni «Circo Criollo», ni ahora «¿Querés jugar?» muestran un Repetto exitoso.
Tirar el corchito de «Sábado Bus» no es muy diferente de estacionar el auto en «Domínico» pero uno fue exitoso y el otro no. Su productor en el flojo de rating «Circo Criollo» era el mismo que lideraba el rating cuando estaba al frente de «Videomatch». Sus productores actuales tuvieron programas muy creativos, que no se repiten con «¿Querés jugar?». ¿Cuál es el motivo de que Repetto haya caído en desgracia? Hasta ahora no escuché ninguno convincente: «la gente no lo quiere más» (¿¡!?), «al público no le gustó que Repetto les contara lo que había pasado en Argentina mientras él se divertía en España» (¿¡!?) y explicaciones similares.
Creo que Rial y Gelblung tampoco creen ninguno de esos argumentos (Rial define a Repetto como uno de los tres mejores conductores de la tv) y es eso lo que los atemoriza. No porque vayan a tener problemas económicos o se puedan quedar sin trabajo, sino porque es una confirmación más de que aquello que ellos creen dominar tiene mucho más de misterio que de razón.
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