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Sinónimos y antónimos con Firefox

Los plugins de búsqueda de la Real Academia Española para significados y dudas son de gran ayuda. Pero faltaba algún método rápido para hallar sinónimos y antónimos en español.

Ahora, con los nuevos diccionarios de El País, que usan la base de datos de Santillana, podremos hacer una búsqueda rápida de sinónimos y antónimos con buenos resultados.

Para no complicar a los legos, voy a dar los pasos para hacer una búsqueda rápida que es más sencillo que instalar un plugin de búsqueda:

1) Ir a «Organizar marcadores».

2) Abrir un nuevo marcador en la carpeta de Búsquedas rápidas.

3) En nombre, escribimos Sinónimos y antónimos

4) En dirección, copiamos esto: http://www.elpais.com/diccionarios/sinonimos-antonimos/%s

5) En palabra clave, escribimos sa y hacemos click en el botón de agregar.

¡Listo! A partir de ahora, cuando necesitemos un sinónimos o un antónimo, pondremos sa, un espacio, y la palabra a buscar en la barra de direcciones y accederemos a la página con el resultado. Por ejemplo sa alegre.

Yo ya empecé a usar esta solución útil, beneficiosa, práctica, provechosa, fructuosa, productiva, servible, buena, eficaz, positiva, ventajosa y cómoda y para nada inútil, ineficaz, inservible, estéril o inhábil.

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Sea un militante del PC

Vuelve la militancia. Después de los hippies ’60s, los nefastos ’70s, los egocéntricos ’80s y los consumistas ’90s, ahora comprometerse vuelve a estar bien visto. Los nuevos militantes reenvían emails, chatean en el Messenger, opinan en foros y blogs, votan en las encuestas online y comentan las noticias en los sitios web de los diarios. Una militancia 2.0. Militancia del PC, pero no del Partido Comunista, militancia del Personal Computer o Computador Personal.

Pero este compromiso con lo que nos pasa no estaría completo sin la acción. Ya no hace falta ayudar a los que menos tienen yendo a las villas. Ahora alcanza con mover un dedo frente a un monitor de LCD. ¿Quieren ayudar a los más necesitados? Pasen y vean el shopping de la caridad:

The Hunger Site: el sitio, activo desde 1999, creó esta modalidad de hacer el bien a fuerza de clicks esponsoreados. Hagan un click aquí o en el banner de acá abajo y después otro en el letrero «Click Here to Give. It’s FREE» y habrán donado una taza de comida.

The Hunger Site

Otras causas para clickear en The Hunger Site: cáncer de mama, salud infantil, alfabetización, deforestación y rescates de animales.

Por los chicos: la versión argentina de The Hunger Site. Haciendo click acá habrán donado «un cuarto de un plato de comida estándar para los niños argentinos necesitados».


CliqueSemiarido: gestionado por la ONG Cáritas Brasileira cada click contribuye a crear cisternas de agua en zonas de Brasil que no disponen de agua potable. Al momento de escribir esto se habían hecho 1.743.790 donaciones.

Die Waldseite: acá el click vale 4,5 centimos de euro y es para evitar la deforestación de los bosques de Costa Rica pero el sitio está sólo en alemán. Está gestionado por Pro Regenwald, una ONG con sede en Munich.

FreeRice: para que esta gente done arroz no les alcanza con que hagamos nada más que click. Tendremos que encontrar los sinónimos adecuados a palabras en inglés. Cada acierto equivale a 20 granos de arroz.

Un Click Solidario: por cada búsqueda en el buscador de Microsoft desde esta página, se contribuye para la construcción de un pozo en Gao, Mali, una de la zonas más pobres del planeta.

CONCLUSIÓN: si, acostumbrados a los tiempos de la web, este listado los abruma y hacer tantos clicks para ayudar a otros es demasiada pérdida de tiempo en sus vidas, una opción todavía más rápida es ir acá, seleccionar todas las ofertas de ayuda de la lista («Select all») y un programa se encargará de hacer click por ustedes. Y ahora sí, con la conciencia tranquila, ¡a seguir mandando cadenas de email!

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Mirada de escritor

«Una vez en quinto grado, en la hora de Lengua, la señorita Nélida nos pidió que completáramos una historia a partir de esta consigna: ‘los exploradores apartaron las ramas, y detrás apareció la ciudad perdida’.

Toda la clase continuó con la historia de los exploradores. Hernán [Casciari] se quedó en las ramas, y contó la historia de dos hormiguitas que cayeron al vacío, a causa del manotazo de un explorador. En ningún momento habló de la ciudad perdida. Las únicas protagonistas del cuento fueron esas dos hormigas.

Al día siguiente la señorita Nélida llamó a Chichita para decirle ‘no tiene nada que ver con lo que pedí, pero lo que hizo tu hijo es genial’.» (el Chiri)

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Apología de la traición I

«Al arte y a la historia sólo se entra por la puerta de la traición. Si San Martín no hubiese traicionado a España, si Leonardo Da Vinci no hubiese traicionado a sus maestros, ninguno de ellos permanecería hoy en la memoria de los hombres. Existe un deber de traicionar en el ser humano, un mandato de subversión contra la herencia de los pensamientos, contra la rigidez de las costumbres, contra la tiranía de la moral, contra las leyes de la estética, contra la prepotencia de la fuerza, contra la extorsión de la culpa.» (Dalmiro Sáenz)

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Apología de la traición II

«Para mí es necesario mentirle a la mujer para conquistarla porque eso es parte de la seducción. Cuando uno conoce a una mujer y te cuenta que le gusta el cine romántico hay que decirle que a uno también. Pasados los seis meses de relación hay que sincerarse y confesarle que nuestro amor por el cine romántico fue simplemente una herramienta para seducirla, que no cambiamos en nada, que somos los mismos que hace seis meses atrás.» (Cacho Castaña)

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El respeto de los géneros

«Un hombre despierta junto a una mujer a la que no reconoce. En una historia policial esta situación podría ser efecto del alcohol, de la droga o de un golpe en la cabeza. En un cuento de ciencia ficción el hombre comprendería eventualmente que se encuentra en un universo paralelo. En una novela existencialista el no reconocimiento podría deberse, simplemente, a una sensación de extrañamiento, de absurdo. En un texto experimental el misterio quedaría sin desentrañar y la situación sería resuelta por una pirueta del lenguaje. Los editores son cada vez más exigentes y el hombre sabe, con cierta desesperación, que si no logra ubicarse rápidamente en un género corre el riesgo de permanecer dolorosa, perpetuamente inédito.» (Ana María Shua)

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Remeras de Julio Cobos

Casi como un ejercicio de anticipación, conté en el post anterior la iniciativa de CNN de convertir en moda sus titulares. Desde ayer, algo parecido pasa también en Argentina.

En el sitio Mercado Libre, se venden remeras con frases del discurso de Julio Cobos en la sesión del Senado que rechazó la ley de retenciones.

A 30 pesos se pueden comprar estos modelos acá:

«No puedo acompañar, y esto no significa que esté traicionando a nadie»

«La historia me juzgará»

«Mi corazón dice otra cosa»

«Mi voto no es positivo»

«Es uno de los momentos más difíciles de mi vida»

¿Y remeras de Ramón Saadi nadie hizo?

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Remeras de último momento

CNN ofrece un servicio para «vestir una noticia». En algunos titulares de su sitio web, puede verse un iconito de una camiseta:

Haciendo click en el ícono de la noticia que nos interese, vamos a una página que generará una remera con el titular elegido y la hora en que se publicó en CNN.com:

Se puede elegir el color, tamaño y estilo (para hombre o para mujer) de la prenda y, una vez pagados los 15 dólares más costos de envío que cuesta, recibirla en nuestros hogares.

Todo muy lindo, pero yo quiero una remera con este titular.

Relacionado:
Mi remera milita por mí
Un nuevo medio de comunicación: remeras

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La revista de Tinelli fracasará

Después del éxito de la revista de Susana Giménez, Marcelo Tinelli tendrá una revista con su nombre. La tendencia es afín al copamiento que vienen haciendo los famosos de la tele en la radio (Gino Renni, Federico D’Elía), la web (Rial, Mauro Viale) y los libros (Sebastián Wainraich, Eduardo de la Puente). Ahora es el turno de las revistas.

Casi nadie puede tener una revista con su nombre. Por tener desde hace años uno de los programas más vistos, Tinelli parece un buen candidato para esta misión. Pero no lo es.

Para empezar, el nombre de la publicación, «Marcelo». Susana Giménez es Susana, pero Tinelli no es Marcelo, es Tinelli. Además, «Susana» suena como nombre para una revista femenina, pero «Marcelo» suena a canción de Raffaella Carrá, de ningún modo evoca a una revista para hombres (heterosexuales).

Susana tiene fans y seguidoras que consumen todo lo que lleva su nombre. Pero nadie en su sano juicio puede definirse como «fanático de Tinelli». Puede gustar como conductor, divertir, pero fan, lo que se dice fan de Tinelli, no es nadie. No es Sandro.

La vida privada de Susana Giménez interesa: Monzón, Roviralta, Cacho Castaña, Corcho Rodríguez, Jazmín y siguen las firmas. La vida privada de Tinelli (la que se puede difundir en una revista con su nombre) no emociona a nadie: Soledad Aquino y Paula Robles, un padre de familia ejemplar.

La carrera de Susana excede la tv, con grandes éxitos en cine y teatro, no así Tinelli, que sólo tuvo notoriedad con Videomatch/Showmatch.

La imagen de Susana todavía se conserva dosificada. Trabaja seis meses al año y aparece en pantalla cinco horas por semana. El programa de Tinelli dura nueve meses y abarca el total de la programación de todos los canales, su cara está saturadísima como para que alguien decida pagar para seguir viéndola también en papel.

Sobre el producto en sí. No parece haber límite para las revistas femeninas, pero no pasa lo mismo con el mercado de revistas para hombres, «Tendencia» tuvo que venderlas en combo. Y eso es un fenómeno mundial. Tampoco esperemos ver minas totalmente en bolas en una revista de Tinelli porque atentaría contra su imagen familiar, el límite es el caño. Su único elemento diferencial podría ser convencer a famosas que hasta ahora no se habían sacado la ropa a que lo hagan, pero ya lo intentó Playboy y fracasó. ¿Va a ser otra revista más con el culo de Jessica Cirio en tapa?

«Susana» tiene un antecedente exitoso en el mercado norteamericano: «O», la revista de Oprah Winfrey. No hay ningún modelo equivalente a «Marcelo» en EE.UU.

Por último, el único intento similar al de «Marcelo» encarado por Tinelli fue la revista de «Bailando por un sueño». Y terminó cerrando.

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Otro referente de la cultura en contra de los blogs

José Pablo Feinmann ya había alzado su voz hace unos meses: «Detesto el bloc, te lo digo. Estoy en contra del bloc. No hay pelotudo que no tenga un bloc y ponelo en negrita. No entro en un blog así nomás».

Ahora se suma a su queja otro Escritor Famoso, que considera a los autores de blogs «peste de occidente que corroe todo lo bueno y bello de nuestra civilización como una marejada de nauseabundo pus intelectual, vómito ensangrentado de mierda en moto salido de las mentes menos preparadas de nuestra época y habría que mandarlos a todos a un centro clandestino de detención y dejarlos ahí para que se mueran de hambre».

Feinmann, que también odia a la tv, relató su negativa experiencia con los blogs: «Saqué una nota cuando murieron Bergman y Antonioni contra Bergman y Antonioni diciendo que eran tediosos y un tipo me mandó un foro donde todo el mundo… el deporte de putearme. Tan fácil, así, el insulto, tan fácil. Y después, como le contesté al tipo, se puso en la gloria: ‘¡qué honor que me contestó!’. ¿Cómo? ¿No era que yo era un tarado, un imbécil, un pelotudo?».

Al P. le pasó algo parecido:

¿Y cómo fue que descubrió ese mundo tan bajo y sórdido de los “blogs”?
P: Fue por completa casualidad, imaginate que a un hombre de mi trayectoria esos sucedáneos de las revistas pseudoliterarias para adolescentes con problemas de aprendizaje mucho interés, más que el antropológico, no le pueden despertar. Pero en cambio sí creo que hoy por hoy internet es una herramienta fundamental, y justamente estaba buscando en internet una cosa, no importa qué cosa, una cosa personal, algo de trabajo, no me acuerdo bien de qué era y aparte no importa, es completamente anecdótico lo que buscaba, a esta altura ya es secundario, cuando caigo accidentalmente en uno de estos “blogs”.

El “Blog de una colegiala con bragas sucias”.
P: Sí, ese. Caigo ahí, completamente de casualidad. Entonces me pongo a leer el “blog” -porque mencionaba un par de cosas que me parecían interesantes para la investigación que estoy haciendo- y pronto me doy cuenta que el texto nada que ver con el título, ni con las fotos. Eran como unas poesías de amor, en fin, nada que ver. Así que cuando vi que existía la posibilidad de dejar comentarios decidí hacerles una crítica constructiva y les aconsejé que no anden haciéndole perder el tiempo a la gente con falsas ilusiones.

¿Tuvo alguna repercusión su comentario?
P: Y, sí, imaginate que llega alguien de mi nivel, de mi trayectoria, para estos pibes que hacen “blogs” es casi como si los visitara Dios. Y hay mucho iconoclasta dando vueltas. Mucho pibe que para autoafirmar su personalidad necesita derribar un ídolo. Así que me empezaron a poner una serie de cosas feas. A mí. Un autor consagrado.

¡Qué espanto, Maestro! No diga más.

P: Y, no, prefiero no repetirlas, no vale la pena.

¿Qué tipo de cosas, Maestro?
P: Cosas, cosas feas. Me parece que no vale la pena y además es de público conocimiento.

Bueno, eso es cierto, acá tengo una impresión con los comentarios del “blog”, que a partir de sus declaraciones empezó a recibir 4.567.000 visitas diarias. Acá está todo.

P: Por eso, por eso. No le hagamos publicidad gratis a estos delincuentes.

Por ejemplo, “Viejo jeropa, qué te pasa, ya no te podés levantar pibas de la facultad que…”
P: (Se pone colorado) Por favor, por favor. Me parece que esos epítetos ya se han repetido y republicado infinidad de veces en los medios de comunicación, inclusive en diversos programas de televisión. En horario central.

Lean el resto de la entrevista-denuncia acá.